el 10 de enero del 2021
De qué va
El intérprete que traduce la confesión llena de orgullo y socarronería del familiar que asesinó a Banaz Mahmod se derrumba. Cuando entrega la transcripción a la inspectora Carolina Goode, esta también estalla de indignación y apenas puede imaginar cómo fueron los últimos instantes de la joven de veinte años. La mataron por “honor”, por ser una mujer kurda enamorada y por pensar que podía confiar en la policía británica. La investigación forense tan solo demuestra la cadena de errores que condujeron a una muesca más en los agravios de las relaciones subyacentes de poder que controlan los géneros.
Nombres propios
En dos capítulos de 45 minutos o una película de 90 minutos si lo prefieres, el creador Richard Laxton reconstruye este caso real con un intachable estilo documental y verista. Una serie observacional en la que cualquier acta forense descrita por sus personajes te revolverá en el asiento y que, gracias a un guion con cero dramatismos, sabe ahondar en la génesis de la violencia machista balanceando causa y consecuencia. Las causas estructurales se reflejan en la radiografía socioeconómica (pobreza, diversidad y precario melting pot) realizada en las localizaciones del norte de Londres, una marabunta de hormigón y credos tóxicos. Las consecuencias se visibilizan en el peso del factor social y cultural (no pasa nada por señalar el peligroso buenismo de importar el integrismo islámico) a través del crudo relato de una muerte anunciada.
Te gustará si te gusta
- “Informer”: otra serie que mostraba el Londres alejado de turistas y se preguntaba, esta vez, por el origen del fundamentalismo islámico.
- “Top Boy”: la llamada “The Wire” británica que retrataba muchas de las problemáticas sociales a las que se enfrenta el Reino Unido más estancado.
- “Principal sospechoso”: la serie que formuló y anticipó los seriales policíacos televisivos gélidos del presente.
En un tuit
Siempre está bien comprobar cómo la ficción televisiva británica está un paso más allá en capacidad discursiva.
— Javier Acevedo (@cosmorfismo) January 8, 2021
Lo interesante de 'Honor' es su denuncia sin ambages del integrismo islámico como causa de la violencia machista y su forma de huir de etiquetas subvencionables. pic.twitter.com/2RG8H3DjqE